miércoles, junio 07, 2006

La excelencia de vivir en Soria

Muchas veces hemos escuchado “en Soria se vive muy bien”, referido al nivel económico que gozan sus habitantes. No sé cual es la media de renta per capita de esta tierra, pero sí puede decirse que la Estadística es la técnica (imposible llamarla ciencia) más injusta que se conoce, sin negarle su efectividad. La definición de Estadística viene a decir que se trata de “la manera de obtener indicaciones probables de conjuntos imperfectamente conocidos”. Desde luego.
Para calcular la renta por persona se suman los beneficios de un agricultor con una hacienda en propiedad de cinco mil hectáreas, por ejemplo, más el sueldo de un político (las dietas no entran, no sé porqué, con lo que les sobra para su particular pecunio), más los beneficios de cualquier prócer de la construcción (no se tienen en cuenta los ilegales), el sueldo de un funcionario del grupo A, I, o como sea, etc., y a ello se le añade (cosas de la estadística), la pensión no contributiva, cualquier otra pensión injusta, el sueldo de un chaval de veinte años con contrato de aprendiz, y todo junto, se suma y se divide por el número de los elementos, y ya tenemos la media. ¿Existe algo más injusto? Eso sí, aunque sólo sea en el mundo de la estadística, pobres y ricos forman un conjunto ideal.
Esto pensaba y de esto hablaba con un amigo, cuando pasó por allí Gregorio Alonso, esa magnífica y generosa persona, colaborador también con Cáritas, y digo también, porque Goyo está allá donde se le necesita. Le comenté el tema de la pobreza en Soria, la parte alícuota que le corresponde a esta provincia de los nueve millones de españoles que viven por debajo del umbral de la pobreza ¡nueve millones! Más del veinte por ciento de una sociedad que se define progresista, europea, justa... Gregorio me dijo que en Soria eso es muy difícil de saber porque poca gente lo dice. Los sorianos, de natural comedidos, aguantan de manera numantina sus necesidades. Los pobres ni tan siquiera se atreven a manifestar su pobreza, como si fueran ellos los culpables.
Al día siguiente de la conversación, Goyo dejó en mi buzón el boletín de Cáritas, la memoria del año 2004. Esta ONG, según mi criterio y a pesar de mi reconocido agnosticismo, es de las pocas, poquísimas, que actúa directamente sobre las necesidades tangibles y urgentes de las personas que se acercan a ella. Ya sé que muchos prefieren la Justicia, yo también, pero mientras llega, si es que llega, las personas se morirían, literalmente, de inanición, si organizaciones como Cáritas no practicara la caridad.
Bien, pues en el año 2004, Cáritas Diocesana de Osma-Soria había atendido a 2.993 personas y había invertido en sus necesidades perentorias más de ciento cincuenta y tres mil euros, casi veintiseis millones de las antiguas pesetas. A esta aportación social habría que añadir las acciones que lleva a cabo Cruz Roja, más los servicios sociales del Ayuntamiento, etc.
¿En Soria se vive bien? El que vive bien, como en todos sitios y lugares. Pero en Soria choca mucho más esta injusticia, se podría pensar que en una comunidad pequeña, donde, según dicen, todo se sabe, debería saberse, esto sí debería saberse, que viven demasiados conciudadanos, estos tres mil más no se sabe cuántos que no se atreven a decirlo, por debajo del umbral de la pobreza. Porque debe ser para ellos muy amargo comprobar cómo se debaten los temas más accesorios y superficiales sin tener en cuenta algo tan fundamental como es el drama particular que están viviendo enmedio de tanta tontería de ricos caprichosos y de administraciones con ganas de agradarles.

1 comentario:

Anónimo dijo...

OLGA LUCIA GIRALDO
YO VIVI EN SORIAM Y ME ENCANTO SOY COLOMBIANA, RECIBI MUCHO APOYO DE CARITAS INCLUSO PARA EL RETORNO A MI PAIS,LES DOY GRACIAS DE CORAZON POR TAN MARAVILLOSA OBRA QUE TENEIS, UN SALUDO MUY ESPECIAL PARA MILAGROS LA LLEVO EN MI CORAZON JUNTO CON TODOS VOSOTROS, APENAS MIRANDO ENCONTRE ESTA PAGINA , PERO SE QUE NUNCA ES TARDE PARA DARLES MUESTRA DE MI GRATITUD Y DE TAN MARAVILLOSA OBRA.